sábado, 16 de enero de 2010

Iluminando mi tesis



En las últimas semanas he mudado mi centro de operaciones para el Instituto de Filología, pues he descubierto que en la universidad me concentro mucho más que en mi casa, cuando se trata del tema tesis. Pero como saben a mi me atacan los nervios y sin un dulce cerca o la cocina para hacerlos no puedo estar, así que reserve una hora de la mañana para preparar mi reserva de energías y felicidad. Pensé ¿qué puedo llevar que sea delicioso y fácil de llevar en la cartera?, y casi como si fuera iluminación divina me acorde de la riquísima torta marmoleada que hace mi tía Laura, y de que ella hace un tiempo me dio la receta. Me lleve varios pedazos en una bolsita de alimentos y la torta no duró ni dos días de lo irresistible que estaba. Aún creo que las tortas marmoleadas de mi tía Laura nadie puede igualarlas, pero la mía quedo deliciosa.

Torta marmoleada
Ingredientes:
300 gramos harina
300 gramos azúcar
200 gramos mantequilla
200 gramos de chocolate
4 huevos
1 vaso de leche
1 1/2 cucharadas de polvo de hornear
ralladura de 1 limón
2 cucharadas de ron





Debemos primero separar las claras de las yemas. Las claras las debemos poner en un bol lo suficientemente grande pues luego las batiremos a punto de nieve.



Rallamos el chocolate. Les confieso que a mitad del proceso de rallar el chocolate me dolía la mano y opté por cortarlo finamente, si tienen en su casa un pica todo o algo como rallarlo sin complicaciones úsenlo.



Batimos la mantequilla con el azúcar en un molde grande hasta que se amalgamen.



Agregamos las yemas y batimos.



Agregamos la harina, el polvo de hornear, la ralladura de limón, la leche y seguimos batiendo.



También agregamos las dos cucharadas de ron. ¡Ojo! Son sólo dos cucharadas, la idea es que el ron le rompa el sabor de huevo a la preparación no que la torta sepa a ron.



Batimos a punto de nieve las claras.



Agregamos las claras batidas a punta de nieve a la mezcla y amalgamamos con cuidado con una espátula de arriba hacia abajo.





Ponemos en otro bol aproximadamente la mitad de la mezcla.



En el bol que acabamos de trasvasarle la mitad de la mezcla de la torta, le agregamos el chocolate rallado y mezclamos bien.





Una vez lista la segunda mezcla, procedemos al armado de la torta marmoleada. Yo les recomiendo para esta torta un molde redondo con hueco en el centro.



Vertemos en el molde parte de la mezcla blanca.



Luego agregamos toda la mezcla con chocolate.



Y terminamos agregando lo que nos quede de la mezcla blanca.



Llevamos al horno a 400ºF. entre 45 minutos a 1 hora.



!Y miren que linda torta!



jueves, 14 de enero de 2010

Año nuevo, recetas nuevas

¡Año nuevo, vida nueva! reza el proverbio y yo con la primera receta que hago en este 2010 quise intentar algo nuevo para mi en la cocina, es decir, usar elementos típicos de la cocina salada en la preparación de dulces. Ejemplo de estos ingredientes es la auyama, para mi conocido como ingrediente de cremas y sopas, y no les voy a mentir, había oído hablar de la torta de auyama, incluso decir que era muy sabrosa, pero nunca la había ni probado. Con el inicio de este nuevo año, que espero traiga consigo un millón y más de cosas buenas, decidí, aunque fuera alegóricamente, romper las barreras que separan lo conocido y lo desconocido, a la conclusión a la que llegué fue que si todo lo que descubrimos es así de extremadamente delicioso, espero que a todos nos lluevan descubrimientos a diario.

Torta de auyama
Ingredientes:
1 taza de puré de auyama
2 tazas de harina
3 cucharadas de polvo de hornear
1 cucharadita de canela en polvo
100 gramos de mantequilla
1 1/2 taza de azúcar
3 huevos grandes
1 cucharada de vainilla






Se que muchos de ustedes sabrán hacer un puré de auyama, pero se que hay personas, al igual que yo en mis primeros tiempos, que ni idea. Primero la lavamos bien, le quitamos las semillas y luego la picamos en pedazos grandes.












Ponemos los pedazos de auyama en una olla con agua que apenas los cubra.






Verificamos si está lista la auyama pinchándola con un tenedor o cuchillo si llega hasta la concha sin ofrecer resistencia está lista.





Un pedazo a la vez hacemos el siguiente procedimiento: se saca un pedazo, se apoya sobre un plato y con una cuchara se separa la pulpa de la concha.










La pulpa la iremos colocando en el vaso de la licuadora, una vez que hayamos terminado con toda la auyama licuamos. Si está muy denso y no se logra licuar podemos agregar un poco del agua de la olla.





De esta pulpa necesitamos sólo una taza. Si no saben que hacer con lo que les quede les sugiero que le agreguen aceite, pimienta y sal y tendrán una crema súper sencilla y deliciosa.





Luego para evitar imprevistos preparamos el molde de una vez. Les recuerdo para el horno generalmente el molde se prepara así: se unta primero con mantequilla y luego se espolvorea con harina. Debemos tener atención de que no queden grumos de harina, podemos evitar que eso pase dándole pequeños golpes firmes al molde luego de haber esparcido bien la harina.















En un bol se ciernen la harina, la canela, el polvo de hornear y la pizca de sal y dejamos ahí hasta que lo vayamos a agregar a la mezcla de la torta.







Batimos la mantequilla con el azúcar. Recuerden que es preferible dejar la mantequilla a temperatura ambiente por algunos minutos antes de comenzar la preparación, pues de esta manera la textura de la mantequilla será mucho más blanda y por lo tanto más fácil de batir.












Una vez que la mantequilla esté completamente incorporada con el azúcar, procedemos a agregar los huevos y seguimos batiendo.




Cuando la mezcla se torne homogénea añadimos la vainilla.





Luego añadimos el puré de auyama y seguimos batiendo hasta que la mezcla tenga un bello color naranja.








Posteriormente agregamos poco a poco la mezcla de ingredientes que teníamos reservados en el bol, luego de haberlos cernido juntos y batimos hasta que desaparezcan todos los grumos.







Vertemos la preparación en el molde y llevamos al horno, previamente calentado, por una hora aproximadamente a 350ºF.









Para saber si la torta está lista podemos insertarle un cuchillo, si este salé limpio implica que la torta está lista. ¡Ojo! no pongan nunca el cuchillo antes de que se haya cumplido al menos mitad del tiempo indicado para la preparación pues pueden impedir que su torta crezca.








¡Lista!
Mi torta la espolvoreé con azúcar pulverizada. Les aseguro chicos, estaba esponjosita y deliciosa.